Nombres comunes: Pachira, Castaño de Guayana
Orígen: Zonas pantanosas y riberas de los ríos de Sudamérica. Principalmente desde el sur de México hasta el norte de Brasil.
Familia: Bombácea
Puede alcanzar los 18 metros de altura y producir flores y frutos, pero esto solo ocurre en su hábitat natural, donde además tiene una floración muy perfumada todo el año.Como planta de interior no florece y no crece tanto.
Se desarrolla bien tanto en lugares soleados como umbríos.
Tiene un tronco enrollado a modo de trenza muy curioso y original.
Sus hojas son largas, grandes, y moderadamente anchas, como las típicas plantas amazónicas.
Necesita bastante luz solar, pero no excesiva. Lo mejor para ella es que le llegue de una forma indirecta. La intensa luz del verano puede quemar sus hojas, por eso hay que vigilarla. La falta de luz, por otro lado, provoca un amarillamiento de las hojas y un crecimiento demasiado rápido de los brotes.
Hay que evitar enfrentarla a corrientes de aire ya que puede secarle las puntas de las hojas y, finalmente, la hoja completa.
El abonado debe ser rico y abundante.No olvidar que su hábitat original se encuentra en una de las zonas del mundo con la tierra más fértil.
El riego ha de ser moderado. Sólo cuando la tierra parezca estar seca.
No soporta temperaturas inferiores a los 5 º C.
A pesar de vivir en terrenos pantanosos, en cultivo no soporta el exceso de humedad, pero tampoco los ambientes secos que le resecan las hojas.
El Sustrato debe ser drenante moderado.
Su multiplicación es por semillas casi siempre. Germinarán mejor si tienen algo de calor. Rara vez funcionarán los esquejes si no son de ramas endurecidas.
Los problemas más comunes de la Pachira son debidos al exceso de agua. Si percibimos que nuestra Pachira está languida y que las bases de sus troncos se reblandecen por momentos debemos actuar rápido retirando los troncos muertos aunque perdamos el trenzado.Después hay que dejarla en un lugar aireado y no regarla durante una semana.
Fuente: Asocoa.com