La jardinería es una actividad muy educativa para los niños y que puede ayudarlos a desarrollar valor por el medio ambiente y la ecología, además de divertirse, por lo siempre es una buena idea inculcarles esta práctica con sus propios cultivos.
Si le destinas un espacio en tu jardín para que tenga sus propias plantas podrá divertirse mientras le das consejos y ayudas a que prospere, lo que no solo le ayudará a afianzar la empresa de proyectos mientras que fortalecen su relación.
Desde luego que las plantas que se escojan para plantar no deben tener espinas o ser tóxicas, dado que los chicos pueden jugar con ellas y lastimarse. No hay que olvidar cerciorarse de que no hayan alergias de por medio.
Tu deber es el de supervisar y guiar, no de hacer tu el trabajo, dado que sino se aburrirá pronto y abandonará el jardín. Los consejos siempre son bueno, pero evita corregir siempre lo que no hace bien dado que se encuentra aprendiendo, y la mejor forma de aprender es equivocándose.