La Iris germánica, de origen europeo, es una de las especies más comunes de los Iris barbados y es muy utilizada en jardinería, aunque es frecuente encontrarla asilvestrada. Pertenece a la familia de las Iridáceas y se le denomina popularmente con un amplísimo de nombres como lirio azul, lirio cárdeno, lirio común, lirio morado, lirio Pascual, Lirio barbado, cárdeno, carrizas, carrucia, cebollas de lirios, cuchillos, espadaina, espadañas, fresilla de monte, ireos de flor blanca, ireos de flor púrpura, iris, lirio, lirio blanco, lirio calzado, lirio cárdeno, lirio de campo, lirio de Florencia, lirio de la flor blanca de Florencia, lirio de las parmas, lirio de maceta, lirio de palma, lirio morao, lirio morao cultivao, lirio silvestre…
La Iris germánica es una planta vivaz rizomatosa (con rizoma rastrero), que alcanza una altura media de hasta 50 centímetros. Es muy resistente y crece en todo tipo de suelos, preferentemente calizos. Es muy rústica hasta el extremo que se puede considerar invasiva por su facilidad de propagación.
Sus hojas son basales, emitidas entre 3 a 10 con una anchura de unos 3 centímetros y una longitud que puede alcanzar hasta el medio metro. Son lustrosas y de color verde claro.
La Iris germánica florece en el hemisferio norte desde la primavera hasta el verano. Produce inflorescencias atractivas con una o varias flores grandes, perfumadas… cuyo color puede variar mucho entre los meses de febrero y junio. Estas inflorescencias surgen de un tallo terminal con hojas en la base y desnudo a medida que se acerca al ápice.
Sus flores son muy atractivas. Tienen tres sépalos extendidos y curvados hacia fuera, de forma ovada y entre ocho y doce centímetros de largo. Son glabras excepto la nervadura central cubierta de pitillos de unos 3 mm., blanco amarillentos o con tonos púrpura.
También son tres sus pétalos, que se extienden erectos y se doblan sobre la parte fértil de la flor. Estas grandes flores son perfumadas y son emitidas en número de tres a seis, generalmente purpúreas o de color violeta en las formas espontáneas. Pero según la variedad, también las podemos encontrar en colores del violeta al blanco, al amarillo y al rojo, con elegantes jaspeados.
Por su rusticidad y su atractiva floración, hace que la Iris germánica se emplee mucho en jardinería. Tiene además diversos usos en medicina popular, perfumería y cosmética.
En este sentido, posee principios activos (aceite esencial, cetonas, sesquiterpenos, ácido mirístico, flavonoides, etc. Entre sus indicaciones, a dosis bajas actúa como expectorante, demulcente y diurético. Y en dosis mayores, como emético. Indicado para bronquitis, asma, enfisema; espasmos gastrointestinales. Estomatitis y molestias de la dentinción, en uso externo.
Su rizoma se utiliza como infusión y el jugo de su raíz puede ser usado como purgante.